El caso ocurrió en el consultorio médico de Cristhian Sosa Sosa (45), ginecólogo, ahora detenido quien es especialista en cirugía fetal y tiene varios procedimientos exitosos en un sanatorio privado de Ciudad del Este.Su detención se produjo ayer, sobre las calles Las Tórtolas y Las Tacuaras, al momento de ingresar al centro asistencial privado, por orden del fiscal Sergio Irán Villalba, quien investiga el caso por acoso y violación.“Iniciamos la denuncia con una de las víctimas, por estrategia procesal, porque normalmente la defensa trata de desvirtuar a las víctimas, involucrando otra cosa, como de hecho lo estamos viendo por las redes sociales están queriendo insinuar otras cosas”, afirmó el abogado Ovidio Arévalo, quien informó que suman cuatro las víctimas. “Las últimas están tomando coraje, gracias a las denuncias y ahora decidieron encarar a este personaje que funje de médico”, agregó el abogado.Los casos pasan por el manoseo en las partes íntimas de las mujeres, a quienes posteriormente, sigue acosando por WhatsApp, incluso amedrentándolas, supuestamente, para que no denuncien sus actos. La pareja del denunciante afirmó ayer que su novia salió llorando del consultorio médico y ya en su domicilio consiguieron tranquilizarla, donde comentó lo que vivió en el centro asistencial. El entrevistado sostuvo que inicialmente no se animaron a denunciar porque creían que era el único caso, pero una vez ventilado en las redes sociales por una influencer, aparecieron otras víctimas y allí ella se animó a denunciar. El posteo a través de las redes sociales tuvo que ser levantado por la persona, por las amenazas que recibió, agregó el joven padre.INOCENTE. “Es grave la denuncia. Nos preocupa. No vamos a decir que es imposible que esto pase. Pero mi cliente niega y nosotros vamos a contribuir para ir aportando pruebas que ayuden a aclarar el caso. Es una paciente de hace tres años y él tiene una cartera interesante de pacientes, miles. Hasta ahora solo hay versiones en las redes sociales, donde sabemos que cualquiera puede entrar y escribir”, afirmó su defensor, abogado Antero Prieto.
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